igual que hay temporadas que llegan nuevos miembros a la familia, sobretodo bebés; hay otras temporadas que se van muchos en poco tiempo.
esta semana ha sido una de esas. una semana para borrar o para olvidar. un semana que te hace pensar qué estaré haciendo mal, porque en el fondo te gustaría racionalizar algo que no se puede. porque hay veces que psan cosas desagradables sin que uno tenga culpa en ellas.
todo empezó cuando perdimos a nuestra última gallina gordita. desde hacía meses tenía un problema de picaje. y con el primer cambio brusco de temperatura se nos fue.
después perdimos un pollito. de un día para otro duplicó su tamaño. estaba muy hinchado. finalmente también se fue.
al día sigiente un anade salió volando fuera de nuestro terreno. no lo encontramos. un día después apareció a 200 metros en la carretera.
al día siguiente, el viernes, nuestro perro, en una taque de instinto, se zampó a otro anade, cuando no estabamos.
desesperante. pero lo que mal empieza mal acaba. el sábado encontré 2 pajarillos muertos en nuestra pajarera y otros 4 se me esfumaron de las manos.
y el domingo, lo peor. uno de mis conejitos murió de una maxomatosis sin previo aviso y encontré a otro muerto. y por si no fuera poco los puedo perder a todos. espero que eso no suceda.